PRORROGADA HASTA EL 8 DE DICIEMBRE
“Lírica de la piel. Conocimiento por contacto”
La sensualidad es un término muy presente en la cotidianidad de las personas, pero realmente ¿de qué se trata? La piel abarca una inmensidad de matices, percibe infinidad de sensaciones y presenta un carácter háptico determinante. Los sentidos son los responsables de que las personas sean seres sintientes, vulnerables a cualquier estimulo que las excite. Aunque la rutina puede llegar a opacar la percepción. Lo que lleva a pensar, si realmente son conscientes de todo aquello que les rodea, como les puede perturbar, seducir, saturar o estimular. Si se detiene a observar cómo florece día a día el lirio del jardín, acariciar el desgaste de su sillón favorito, oler aquel libro antiguo, escuchar el silbido del viento o saborear ese postre compartido, nada sería nunca igual, porque aquel lirio un día marchitó, mañana no tendrá la misma conversación en su sillón, ese libro antiguo dejara caer sus páginas desgastadas, un día el viento no silbará y ese postre tal vez no lo vuelva a compartir. La manera en la que los sentidos erizan la piel surge de como las personas enlazan un estímulo con otro o cómo les conduce a un recuerdo enterrado. La sinestesia marca los pasos de ese enlace, convirtiendo un olor en un lugar o una textura en una persona. En esencia, la sensualidad señala el color con el que las personas ven la vida, ahora es cuestión de cada una cómo deciden interpretarla.